Cómo actuar frente al impago de un cliente

Como bien dice el refranero español "más vale prevenir que curar". Es decir, no podemos considerar que el riesgo de impago sea una variable incontrolable, debemos reducir el riesgo que todo empresario tiene en el día a día de su actividad. Para ello, recomendamos algunas pautas que pueden ayudarnos a minimizar el impacto que generan las facturas impagadas en el balance de nuestro negocio, como: conocer de antemano la solvencia de los clientes así como conocer al departamento comercial, fijar el límite máximo de riesgo o realizar contratos de comercialización que recojan garantías para el hotelero.
Estos servicios pueden ayudar a las empresas a controlar la evolución del riesgo,
facilitando la toma de decisiones de negocio y minimizando los impagos.
Os detallamos absolutamente todo en la circular que podéis acceder en la sección exclusiva para asociados en la que también informamos de la gestión amistosa: reclamación extrajudicial de la deuda y la reclamación judicial de la deuda.
La prevención es la mejor arma ante el impago de un cliente.